Con la ayuda de sus profesores, han creado su propio papiro a partir de un papel A4. Primero, lo han coloreado con tiza marrón y naranja, y luego lo han pegado en una pieza de cartón siguiendo un patrón de tejido. Finalmente, lo han cubierto de pegamento líquido y han esperado a que se secara. Una vez listo, utilizaron jeroglíficos para escribir su nombre dentro de un cartucho del Antiguo Egipto. El cartucho es un anillo ovalado donde los egipcios solían escribir el nombre de una persona importante, como el del faraón.
A, B, C… En vez de escribir siguiendo el alfabeto latín, han aprendido a hacerlo con imágenes, los conocidos jeroglíficos.
“A los alumnos les encantó hacer los papiros porque pudieron pringarse un poco y el resultado final fue increíble”, dice la profesora Ms. Steward. “También disfrutaron muchísimo aprendiendo sobre los jeroglíficos”, añade.
Los alumnos han exhibido sus trabajos en el colegio, así que ahora el resto puede jugar a intentar interpretar los signos del papiro sin conocer el nombre del autor, que se puede comprobar en la esquina de cada obra. ¿Y tú? ¿Te atreves a utilizar la guía para descifrar el nombre que te mostramos a continuación?